jueves, 5 de mayo de 2011

UN JUEVES DEL FINAL DEL CICLO

No es Ciencia-Ficción. Fuímos al banco, sobre las 9h 40m. Estaba vacío. Eramos los únicos clientes, atendidos por dos empleados (el y ella) que estaban del modo más obsceno mano sobre mano,- cuando antes había cuatro- y largas colas de usuarios. Aparecían con una sombra de depresión y preocupados seguramente, por la posibilidad de perder sentido su ocupación no hace mucho a todas luces segura y bien pagada.
"Sic transit gloria mundi".
Los ciudadanos nuevamente prefieren tener el dinero en el calcetín.


Al salir del banco nos fuímos al parque, para oxigenación y meditación filosófica. Notamos que estaba en situación indecente. Sucio y abandonado. Con los chafarisis desconfigurados unos, inactivos otros, deslabazado el conjunto , que abunda en la situación de abandono, y también en la función y estética soez de sus mantenedores. Los peones -eventuales -, no mejoran la prestación, y prácticamente cobran menos por no hacer nada. Salvo deber su voto, agradecido al contratante (en su regalía), que cuidando el paño , los tiene en tránsito de la cafetería al parque para evaluación sin fin casi, de la operación y faena a efectuar: En el parque se acentúa el descuido, y los patos -también desmoralizados, fueron otros sus días de gloria - , ceden su sitio a las gaviotas. Y aparecen ya casi a totalidad sustituídos por ellas.

Es el finiquito, la extinción "en suma y sigue" de parcelas que fueron, que tuvieron existencia intensa, que ocuparon interiorizaciones importantes en los "humus" de cada uno y muchos de nosotros, y ... que tienen complicado el porvenir en el como son.


Daniv apremia a Caminante, y Caminante urge a Daniv, ¿qué será ahora de nosotros sin money, sin parque, sin patos, sin jardineros , y con exceso de gaviotas y de regalados?


1 comentario:

  1. ¿Os dedicáis a meter el dedo en el ojo de los que tienen buen pasar, y se instalan en el "diletantismo"? Para digestión tranquila de la manteca ...

    ¡No debéis perturbar a los quietos! Podréis producirles retortijones y acentuar los ensalibamientos de autoglorificación para mejor explicar lo benéfico de sus excesos

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